Desde la perspectiva del Ayuntamiento, la situación generada por el deterioro de la torre de la Mínimas se abordó teniendo en cuenta tres factores: las implicaciones de su estado de conservación, la urgencia de los tiempos y la necesidad de recursos para sufragar el elevado coste de la intervención. En el proceso de actuación llevado a cabo ha sido fundamental la colaboración generada entre las diversas y diferentes instancias e iniciativas públicas y privadas, tanto en lo relativo a la concienciación como en la aportación de recursos.
Los antecedentes directos se remontan a comienzos de 2020, cuando se producen algunos desprendimientos puntuales de material de la torre. Al margen del balizamiento de la zona afectada en la vía pública para evitar daños personales, los servicios técnicos municipales procedieron el 27 de enero a una visita de inspección para comprobar el grado de deterioro de la torre mediante un reconocimiento tanto del exterior (con grúa), como en el interior, observándose algunas deficiencias.
Ello motiva la iniciativa de la Concejalía Delegada de Obras y Urbanismo de resolver, con fecha 18/02/2020, la apertura de un expediente sobre el tema y la elaboración de un informe por la Oficina Municipal de Obras. Dicho informe, de fecha 19/02/2020, elaborado por Mª Dolores Aguilera Romero, Maestra de Obras del Ayuntamiento, vino a precisar el estado de conservación de la torre, haciendo constar las deficiencias observadas en cuestiones como el anclaje de la decoración de piezas esmaltadas, el rejuntado de fábrica y el estado de las vigas interiores del campanario. La evaluación de la situación aconsejaba una reparación a la mayor brevedad posible en orden a mantener la estabilidad estructural de la torre, a evitar nuevos desprendimientos que afectaran la seguridad de la vía pública y a salvaguardar la estética de la torre.
Al corresponder la propiedad del inmueble a la Comunidad Religiosa, se remitió a esta un requerimiento, de fecha 25/02/2020, con el citado informe, para solicitar su colaboración procediendo en el plazo de un mes a realizar las medidas cautelares de seguridad y el proyecto de intervención propuesta, a tramitar ante la Consejería de Cultura: tal medida se fundamentaba en el deber de los propietarios de inmuebles de mantenerlos en condiciones de seguridad, salubridad y ornato público, atendiendo además en este caso a la especial significación del inmueble como bien destacado del Conjunto Histórico de Archidona.
No obstante, estando aún en curso la cuestión del citado requerimiento, ante el mal estado de la torre y el riesgo que ello suponía, y tras varias conversaciones con la Correctora del Convento donde se exponen los pocos recursos disponibles por su parte, desde la Oficina Municipal de Obras se tramita por urgencia con la delegación de Cultura de la Junta de Andalucía la adopción de medidas de seguridad: un informe sobre el estado de la torre, de fecha 10/07/2020, redactado por Inmaculada Montero Gálvez, Arquitecta de la Oficina Municipal de Obras y Urbanismo, plantea la necesidad de reparación de aquella en la mayor brevedad posible, proponiendo entretanto la colocación de una red protectora de obra de 50x50 mm como medida de emergencia de protección ante el riesgo de nuevos desprendimientos que pudieran afectar a la seguridad de la vía pública. Dicho informe técnico es remitido con fecha 14/07/2020 a la Delegación Territorial de Fomento, Infraestructuras, Ordenación del Territorio, Cultura y Patrimonio Histórico, de la Junta de Andalucía en Málaga, que tras el correspondiente informe favorable autoriza la instalación de dicha red en el exterior de la torre.
El 4 de agosto, tras el adelanto de dicha autorización (la resolución tuvo entrada en el Ayuntamiento con fecha 07/08/2020), se procede a la colocación de la red de protección en la torre por parte de los trabajadores municipales y con el alquiler de una grúa con canasta. Dicha medida cautelar vendría a prevenir riesgos entretanto se redactase el proyecto de conservación de la torre, teniendo ya constancia de iniciativas tomadas por la propiedad para la elaboración de estudios por técnicos en la materia. En otro sentido, ya con anterioridad se había decidido la suspensión del repique de campanas para evitar un posible efecto negativo de las vibraciones.
La situación alcanza un momento crítico cuando el sábado 12/12/2020, sobre las 16:20 horas, se produce el desprendimiento de parte de una cornisa de ladrillo del último cuerpo de la torre, sin que afortunadamente se produjeran daños personales gracias a la red protectora. La zona fue acordonada y controlada por efectivos de la Policía Local y Protección Civil, personándose en la misma la arquitecta municipal e interviniendo asimismo personal de los Servicios Operativos del Ayuntamiento y efectivos del Consorcio Provincial de Bomberos, que acudieron para retirar el material desprendido y asegurar la estructura.
La situación creada acentuaba para este Ayuntamiento los diferentes frentes de preocupación abiertos, los cuales venían a motivar y justificar las iniciativas encaminadas a la debida resolución del tema:
a) Obviamente, como referente prioritario de atención, el de velar por la seguridad de las personas. Independientemente de su valor patrimonial, la torre no deja de ser un elemento arquitectónico más de la trama urbana donde se desarrolla la vida ciudadana. Cualquier deficiencia en la estabilidad de su estructura o de alguno de sus componentes representaba un riesgo manifiesto, por su emplazamiento en una zona de notorio tránsito de personas y vehículos; sin olvidar, en otro orden, el riesgo para los inmuebles del entorno inmediato, tanto los domésticos, como la propia iglesia del convento.b) En segundo lugar, el deber de tutela sobre nuestro patrimonio histórico, al dictado de lo dispuesto en la Ley 14/2007, de 26 de noviembre, del Patrimonio Histórico de Andalucía: “Corresponde a los municipios la misión de colaborar activamente en la protección y conservación de los bienes integrantes del Patrimonio Histórico Andaluz que radiquen en su término municipal, en especial a través de la ordenación urbanística, así como realzar y dar a conocer el valor cultural de los mismos. Asimismo, podrán adoptar, en caso de urgencia, las medidas cautelares necesarias para salvaguardar los bienes del Patrimonio Histórico Andaluz cuyo interés se encontrase amenazado, sin perjuicio de cualquier otra función que legalmente tengan encomendada.” (artº 4.2). Tanto más al integrarse el Convento de las Mínimas dentro del área declarada ‘Conjunto Histórico’ por Real Decreto 3093/1980, de 22 de diciembre (BOE 18/02/1981).c) Una tercera consideración se ligaba a la dimensión del patrimonio cultural como un factor de desarrollo en el ámbito de la economía local, fundamentalmente como recurso de la propuesta turística del lugar, contribuyendo asimismo a la imagen de la ciudad proyectada al exterior. Y qué duda cabe que el Convento de Jesús María del Socorro, de Monjas Mínimas de San Francisco de Paula, constituye uno de los activos más notorios del Patrimonio Histórico y Cultural, tanto material como inmaterial, de Archidona, ofreciendo al visitante, al margen de la contemplación exterior del conjunto (con el hito dominante de la torre), el acceso a su iglesia, el apartado de la venta de dulces y la más reciente incorporación de la exposición dedicada a Sor Mª del Socorro Astorga.
Al acentuar el siniestro sobrevenido la urgencia de la reparación de la torre, se requiere a la Comunidad de Monjas Mínimas, por decreto de Alcaldía de 15/12/2020 notificado al día siguiente, como propietaria del inmueble, que lleve a cabo las actuaciones exigidas por el deterioro de la torre, especificadas en la propia orden de ejecución, atendiendo a lo dispuesto en el artº 155 de la vigente Ley Ordenación Urbanística de Andalucía, en virtud del cual los propietarios de terrenos, construcciones y edificios tienen el deber de mantenerlos en condiciones de seguridad, salubridad y ornato público, realizando los trabajos y obras precisos para conservarlos o rehabilitarlos, pudiendo ordenar los municipios la ejecución de las obras necesarias para conservar las condiciones requeridas.
El 18/12/2020, acompañado por la maestra de obras del ayuntamiento, encontrándose de baja la arquitecta municipal, gira visita a la torre Pablo Pastor Vega, arquitecto técnico y graduado en Ingeniería de la Edificación, quien será el encargado de redactar el estudio técnico para las obras de emergencia en la torre, a quien le sería facilitada toda la documentación disponible que pudiera contribuir a su elaboración. Dicho técnico quedaría autorizado por la Correctora del Convento para ser su representante en las gestiones referidas a las obras ordenadas por la orden de ejecución, asumiendo asimismo el encargo de la dirección de obra.
De este modo, con fecha 13/01/2021 y con el fin de solicitar su autorización urgente, tuvo entrada en la Delegación Territorial de Fomento, Infraestructuras, Ordenación del Territorio, Cultura y Patrimonio, de la Junta de Andalucía en Málaga, la documentación técnica remitida por el Ayuntamiento de Archidona consistente en el proyecto básico y de ejecución para las obras de emergencia en la torre, promovido por la Orden de Monjas Mínimas y redactado por el mencionado arquitecto técnico, para dar respuesta a las medidas contenidas en la orden de ejecución emitida por el Ayuntamiento, siendo acompañado dicho proyecto por un informe de la arquitecta municipal. Tras emitir informe favorable de los correspondientes servicios técnicos, la delegada territorial de Cultura y Patrimonio Histórico en Málaga resuelve, con fecha 19/01/2021, autorizar las obras contenidas en la propuesta técnica presentada.
Finalmente, las obras de restauración se ejecutaron entre los meses de febrero y mayo de 2021, a cargo de la empresa ‘Hermanos Campano S.L.’, una de las tres que habían aportado presupuesto para la ejecución de las obras, presupuestos solicitados con la colaboración de la arquitecta municipal y de acuerdo al procedimiento establecido. La ejecución del proyecto permitió corregir las deficiencias diagnosticadas, respondiendo al concepto de ‘conservación curativa’, destinada a intervenir sobre un bien en estado de degradación con la finalidad de reforzar su estructura o detener el deterioro que pueda estar poniendo en riesgo su integridad física; por otra parte, su alcance resultaba acorde con lo prescrito en la Ley 14/2007, del Patrimonio Histórico de Andalucía, al precisar que “Las intervenciones de emergencia o, en su caso, las medidas cautelares se limitaran a las actuaciones que resulten estrictamente necesarias” (artº 24).
Capítulo fundamental en el proceso fue la implicación de otras entidades e instituciones, sobre todo en orden a la disponibilidad de recursos económicos para acometer el proyecto, cuyo coste presupuestado se elevaba a un importe cercano a los 72.000 euros, habida cuenta de la carencia de los recursos necesarios por parte de la comunidad conventual.
El tema genérico de la cooperación institucional en pro del patrimonio queda recogido en la vigente Ley del Patrimonio Histórico de Andalucía: “Las Administraciones Públicas colaborarán estrechamente entre sí en el ejercicio de sus funciones y competencias para la defensa, conservación, fomento y difusión del Patrimonio Histórico, mediante relaciones recíprocas de plena comunicación, cooperación y asistencia mutua.” (artº 4.1.). En el presente caso, el Ayuntamiento procedió a solicitar a otras administraciones superiores la posibilidad de acogerse a subvenciones extraordinarias de concesión directa para emergencias, salvando los trámites y plazos de una convocatoria pública, al responder a tal la naturaleza la intervención en la torre: de este modo, se remitieron sendos escritos, de fecha 13/01/2021, a la Delegación del Gobierno de la Junta de Andalucía en Málaga y a la Excma. Diputación Provincial de Málaga, exponiendo la necesidad de solicitar una ayuda de carácter excepcional, argumentando el interés público de la intervención al tratarse de una actuación destinada a la conservación de un patrimonio inmueble de valor histórico-artístico afectado por una situación de riesgo y mediando la necesidad urgente de garantizar la seguridad de las personas ante los episodios de desprendimientos de materiales.
El 20/01/2021 la vicepresidenta segunda de la Diputación de Málaga, Margarita del Cid, y el diputado Juan Álvarez se reunieron con la alcaldesa de Archidona y posteriormente, junto a la delegada territorial de Cultura y Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía en Málaga, Carmen Casero, visitaron la torre y mantuvieron un encuentro con las religiosas. La Diputación comprometía su ayuda económica en la financiación de las obras de emergencia, contando ya con la resolución favorable de la mencionada Delegación Territorial autorizando el proyecto básico y de ejecución presentado.
Por su parte, el Ayuntamiento habilitaría recursos propios, añadiendo una partida presupuestaria a los aproximadamente 3.000 euros invertidos en la operación del 12 de diciembre y posterior colocación de la red. Evidentemente la complejidad del momento a causa de la pandemia seguía imponiendo una disciplina de prioridades, pero era manifiesta la urgencia de solventar una situación de riesgo para la seguridad de las personas y para uno de los bienes inmuebles emblemáticos del patrimonio histórico de Archidona.
A todo ello venía a sumarse la cooperación del Obispado de Málaga, que, aun no siendo titular de la propiedad, asumió la financiación de la redacción del proyecto técnico y la dirección de obra. Por su parte, la Comunidad de Monjas Mínimas y la iniciativa popular se movilizaron para la recogida de fondos.
El proceso vivido es un testimonio más de la necesidad e importancia de colaboración entre los ámbitos público y privado en la salvaguardia del patrimonio. Intervenciones, como la realizada, contribuyen tanto a redescubrir nuestro patrimonio como a manifestar nuestra estimación del mismo. Patrimonio que no solo es legado del pasado, sino que debe asumirse en el presente como parte de la memoria social y factor de desarrollo para ser trasmitido a las futuras generaciones en las mejores condiciones posibles con una adecuada y sostenible puesta en valor.
Mercedes Montero.
Alcaldesa de Archidona.
